El autosabotaje es un patrón de comportamiento que puede limitar nuestro crecimiento personal y profesional, nos impide alcanzar nuestro máximo potencial y nos mantiene atrapados en ciclos de autodestrucción. Afortunadamente, existen herramientas y técnicas que pueden ayudarnos a superar el autosabotaje y liberar nuestro verdadero potencial, siendo una de ellas muy poderosa: el swish, utilizado en PNL.
Lo primero de todo es comprender el autosabotaje, que nos impide alcanzar nuestros objetivos y vivir una vida plena. Puede manifestarse de varias formas como, por ejemplo, con la procrastinación, miedo al éxito, excesiva autocrítica o falta de confianza en uno mismo. Reconocerlo y comprenderlo es el primer paso para superarlo. El chasquido o swish se utiliza para reemplazar patrones mentales negativos en pensamientos positivos y constructivos. Se basa en la idea de que nuestra mente tiene la capacidad de cambiar las imágenes mentales asociadas con una determinada situación y esto puede influir en nuestros pensamientos, emociones y comportamientos.
PASOS PARA REALIZAR EL SWISH
a) Identifica el patrón de autosabotaje. Antes de todo es importante saber cuál deseas cambiar. Puede ser una creencia limitante, una imagen mental negativa o una emoción autodestructiva asociada.
b) Crea una imagen mental positiva. Una vez identificado el patrón, créala y que represente cómo te gustaría ser, actuar o sentirte en lugar del autosabotaje. Esa imagen debe ser vivida, emocionalmente poderosa y estar asociada con pensamientos y emociones positivas.
a) Visualiza la imagen del autosabotaje. Cierra los ojos y visualiza claramente la imagen del patrón de autosabotaje en tu mente. Observa los detalles de la imagen y toma conciencia de las emociones y pensamientos asociados.
b) Swish. En el momento en que tengas clara la imagen del autosabotaje, realiza un chasquido con los dedos y, al mismo tiempo, reemplaza rápidamente la imagen del autosabotaje por la imagen mental positiva que has creado antes. Imagina que la imagen negativa se desvanece rápidamente mientras la imagen positiva ocupa su lugar. Hazlo con decisión y energía.
c) Repite el proceso. Hazlo varias veces, asegurándote de realizar el chasquido o swish con energía y cada vez con más convicción. Esto ayudará a reforzar la asociación entre el chasquido y el reemplazo de las imágenes.
d) Practica la nueva imagen. Después de realizar el chasquido, tómate unos momentos para vivir plenamente la nueva imagen mental positiva. Sumérgete en ella, vívela al máximo, experimenta las emociones positivas asociadas y visualízate actuando de forma segura. Practica esta imagen mental de forma regular para fortalecerla y consolidarla en tu mente.
e) Repítelo en distintas situaciones. Una vez que estés cómodo/a con el proceso de chasquido o swish, empieza a aplicarlo en diferentes situaciones en las que el autosabotaje tiende a manifestarse. Puede ser antes de una presentación, al enfrentar un desafío o en cualquier momento en el que sientas que el autosabotaje se está activando. Utiliza el chasquido para reemplazar los pensamientos y emociones negativas por la imagen positiva y empoderadora.
REFORZAMIENTO
Mantén una actitud positiva, cultívala hacia ti mismo/a y hacia el proceso de cambio. Confía en tu capacidad para superar el autosabotaje y recuerda que el cambio en nuestra mente lleva tiempo y práctica, sé paciente y no esperes conseguirlo rápidamente. Si encuentras dificultades para aplicar esta técnica, considera buscar la ayuda de un coach, que la conocerá perfectamente. Y, por supuesto, practícala regularmente para conseguir resultados duraderos.
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